- ¿Por qué?
Son tratados que se han hecho a espaldas de la población europea y de sus representantes sociales.
En el caso del TTIP, en lo poco que se conoce, es un acuerdo dañino para las personas, que solo beneficia a los mercados y empresas en detrimento de los trabajadores y que supone un torpedo en la línea de flotación de la sociedad europea, su calidad de vida y los estándares de sus ciudadanos.
El acuerdo entre la UE y Turquía sobre los refugiados es ilegal e inmoral porque atenta contra los derechos humanos y el derecho de asilo, además de vulnerar numerosos convenios internacionales. Un acuerdo que es una expresión más de una Europa basada en intereses económicos que juega con los derechos de su población y toma las medidas más crueles contra quienes no pueden alzar su voz.
- ¿Cómo?
Diciendo NO las actuales formulaciones del TTIP y el CETA, negociados de manera opaca y que atacan al empleo, a los derechos laborales y las condiciones de trabajo, el medioambiente, la protección social y los servicios públicos de los países afectados.
Exigiendo el respeto a los estándares medioambientales, laborales, de protección al consumidor y a la salud pública, entre otros, establecidos en tratados y acuerdos europeos e internacionales.
Promoviendo la eliminación de los mecanismos de resolución de conflictos y de los tribunales de arbitraje y demandando tratados de libre comercio de progreso, democráticos y transparentes.
Exigiendo la derogación del acuerdo UE-Turquía y cumpliendo los compromisos de reubicación y reasentamiento de solicitantes de asilo.
Exigiendo un compromiso real con la defensa del derecho de asilo y el respeto a los derechos fundamentales de los migrantes en España y en las instituciones europeas.
Promoviendo un nuevo enfoque en el que el objetivo principal sea impedir que las personas mueran o pongan en peligro su vida intentando llegar a territorio europeo.
