La
cadena vasca de restauración Lizarran, que cuenta actualmente con 202 locales
abiertos en España, prevé duplicar en cinco años su tamaño, hasta alcanzar la
cifra de 400 restaurantes en 2018.
Lizarran
forma parte del grupo de restauración Comess, que preside Manuel Robledo, quien
hoy ha participado en el XXIV Encuentro Empresarial en el Pirineo, que reúne en
La Seu d'Urgell a unos 600 empresarios y directivos.
Robledo
ha explicado que Lizarran tiene en marcha un ambicioso plan de crecimiento que
se concentrará, principalmente, en las comunidades de Cataluña y Madrid y que
le permitirá multiplicar por dos su número de locales en España en sólo cinco
años.
Ha
afirmado que la cadena "tiene capacidad de crecer" aprovechando, en
parte, el elevado número de bares y restaurantes que cierran en España en los
últimos años a consecuencia de la crisis.
"Como
han cerrado tantos bares, han quedado muchos locales cerrados y medio
montados", ha explicado Robledo, que ha señalado que gracias a ello ahora
es posible abrir una franquicia Lizarran con una inversión de 50.000 euros.
"La
inversión es de 1.000 euros por metro cuadrado y se recupera en un plazo máximo
de veinte meses", ha apuntado el empresario, que ha bautizado este plan de
crecimiento como el "plan renove" Lizarran.
Robledo
ha asegurado que la cadena quiere estar presente en todas partes, desde hospitales,
hoteles, universidades, gimnasios y hasta tanatorios, y que por ello está
haciendo un gran esfuerzo por "vender franquicias a todo el mundo, todo el
día y en todos los sitios".
"Todos
los locales tienen que vender más y ser más rentables. Por eso hay que vender
muchas franquicias y ocupar todo el espacio que nos dejen", ha subrayado.
Robledo
ha compartido mesa de debate con el presidente de Enagas, Antoni Llardén, quien
ha reclamado a Europa que avance hacia la unión fiscal y bancaria, ya que si no
es así "será difícil salir adelante".
En
cualquier caso, se ha mostrado optimista y convencido de que la UE será capaz
de disponer, al menos, de las herramientas básicas que permitan superar esta
crisis: una unión financiera, una "cierta" unión fiscal y un Banco
Central Europeo que realice las funciones "de todo banco central".