martes, 11 de noviembre de 2014

Una tregua temporal

El viernes pasado firmamos el Convenio. No subió al acto de la firma el Concejal y sí asistió, como es normal, el Gerente. Después, se celebró un Consejo de Administración para aprobar los presupuestos de la empresa para el 2015. Esta semana, hablando con otro de los protagonistas de esta negociación, coincidíamos en que la firma del Convenio fue un tanto desabrida, seria, formal… Y es cierto. Esta Sección Sindical ha puesto su firma en el documento sin dudas, nos hemos aplicado en el proceso negociador hasta las cejas, y creemos haber hecho un muy buen trabajo, pero la sensación que nos queda no es de alegría, quizás la sensación sea de un alivio temporal, de una tregua en un conflicto que aún no se ha resuelto, porque no depende de la firma de un documento en una sala de reuniones de la EMT.
 
Respeto al resto de la comisión negociadora
 
Seguramente, no todo el mundo se ha aplicado con la misma generosidad, pero el nivel de esfuerzo y trabajo conjunto ha sido muy aceptable. La gente de UGT en la EMT nos implicamos, compartimos información, trabajamos duro y lo hacemos en un proceso negociador, en la revisión de unos textos o en un acuerdo sobre refuerzo del servicio nocturno. Además, no perdemos el culo por ser los primeros en informar para apuntarnos el logro, ni ponemos un sello en cada aporte que hacemos.
No entendemos, por ejemplo, que si tenemos dos comisiones pendientes para resolver los enormes problemas de los aparcamientos, una de Seguridad y Salud y otra de Coordinación, un sindicato se intente apuntar un tanto presentando una denuncia en solitario a la Inspección de Trabajo. Lo dijimos en un comunicado anterior: si pasado un plazo la empresa no atiende el enorme listado de deficiencias que hemos presentado en conjunto, cada uno quedará libre de manos para presentar las denuncias oportunas.
 
Tampoco entendemos, con el asunto del horario del personal administrativo, que se falte a la verdad o que se cuenten milongas. UGT no firmó el Convenio en el que se incluyó un incremento enorme en su jornada. Es cierto que estaba decretado, pero también que se incluyó en el texto y que los que hoy hablan de presentar una denuncia lo hacen para exigir el cumplimiento del decreto, no para restablecer nada…
 
También es cierto que cuando se produjo el robo a mano armada del incremento de jornada del personal administrativo, y eso apareció como condición de ultima hora, se comprometió la empresa en intentar compensar o intentar encontrar una solución a ese agravio. Exactamente ese compromiso, es el que recordó el portavoz del Comité de Empresa al Gerente después de la firma y se trata, ni más ni menos, que de desplazar 15 minutos del descanso al final de la jornada.
 
No se trata de que el personal administrativo elija entre posibles soluciones, se trata de encontrar el modo de que se pueda terminar la jornada 15 minutos antes por un lado, y por otro se plantea el someter a la consideración de un Magistrado que el decreto no se ha aplicado correctamente. Para no engañar a la gente, habría que decir que se trata de ir haciendo algún acomodo hasta que en el 2015 abordemos el Convenio unificado en el que, sobre todo, tenemos el problema de que existen seis categorías distintas de personal administrativo con condiciones económicas y laborales distintas. De todos modos, el Gerente se ha comprometido a preguntar si es viable lo que se propuso, y ya veremos si se trata de una consulta con buena intención o si están deseando que el Ayuntamiento conteste negativamente.
 
No es momento de celebraciones
 
Hay mucho pendiente que intentaremos llevar a Comisiones de Trabajo y, además, con voluntad de conseguir algunos acuerdos en un plazo corto. Pero, de momento, hemos salvado las jubilaciones parciales, la IPT, la incorporación a la empresa de nuevo personal, las tablas salariales, las condiciones laborales y sociales… Hemos parado los recortes, les hemos hecho comprometerse a mantener la condición de la EMT como empresa pública, cerrar el 2014 sin pérdidas, presupuestar un 2015 también equilibrado, y hasta dotar presupuestariamente la devolución de parte de la paga que nos robaron. Hemos conseguido todo eso, nos hemos dejado mucho en el camino y mucho pendiente de resolver, hemos salvado de momento la situación y, sin embargo, ni nos sentimos seguros, ni confiados, ni dispuestos a bajar la guardia…
 
No nos gusta, sin embargo, que recorten recursos al servicio de transporte, ni que nos apliquen su mirada inquisidora sobre los índices de ocupación y frecuencias; que presupuesten que nuestra actividad principal es deficitaria y que eso se compensa con la fusión y con otras actividades complementarias, tampoco nos hace demasiada gracia.
 
De todos modos, quien quiera brindar con cava, que brinde. Hemos firmado el convenio, se cierra el 2014 sin pérdidas y se presupuesta un 2015 austero, pero sin problemas importantes. Nosotros preferimos seguir trabajando, seguir apostando por la unidad y la negociación conjunta, y no intentar aventuras en solitario de denuncias, y cosas por el estilo, para obtener rédito electoral. Cuando hemos tenido que mojarnos en las asambleas, lo hemos hecho; cuando hemos tenido que denunciar en los medios de comunicación, lo hemos hecho con nombres, apellidos y datos concretos; cuando ha correspondido movilizarse, nos hemos movilizado; y cuando se ha tratado de influir políticamente, también hemos estado ahí. Desde el portavoz del sindicato hasta el último delegado, ha trabajado duro en un proceso muy complicado. Ahora, uno ve el resultado y no parece gran cosa y eso es porque, en esta ocasión, se firma sin sufrir en nuestras nóminas el impacto de ninguna jornada de huelga.
 
Tampoco nos gusta dejar de lado ningún colectivo, y con el mismo empeño que hemos puesto en trabajar para conseguir en tiempo record una normativa y un sistema de libres equilibrado para los nuevos conductores y conductoras, nos aplicaremos en completar los proyectos de normativa de distintos colectivos. La de inspectores, en concreto (que presentamos el 11-06-2013), hubiera sido necesaria para evitar un traslado caprichoso e injustificado que se ha producido recientemente, y que ha terminado con una demanda ante los Juzgados de lo Social por una modificación sustancial en las condiciones de trabajo de un inspector, un trabajador, un afiliado…
 
Seguimos trabajando…
 
Como decimos, y después del esfuerzo que ha supuesto completar la normativa de refuerzo del servicio nocturno, al mismo tiempo que revisábamos los textos del Convenio, ahora lo más inminente es resolver la situación del personal desplazado en los aparcamientos y, además, estamos a la espera de recibir la respuesta solicitada al Ayuntamiento sobre la jornada de los Administrativos.
 
El sistema empleado para la asignación de la vacación de los conductores y conductoras, tampoco satisface a todo el mundo, y las quejas de algunos compañeros y compañeras son parte de la rutina habitual. Los procedimientos se pueden ir revisando y ajustando, y esto forma parte de la normalidad; hasta forma parte de esa normalidad el que ya se esté trabajando sobre los cuadros que nos darán la medida exacta de lo que supone la aplicación en la práctica del 902.
 
En otros ámbitos en los que se toman decisiones que nos afectan, están entretenidos preparando las próximas elecciones municipales, y nadie va a mover un dedo hasta entonces. En esta ocasión, se teme realmente lo que pueda salir de las urnas, y que la gente pase de “vomitar por las esquinas” ante tanta corrupción a tomar decisiones de cambio político sin precedentes.
 
Después de la firma del Convenio hemos vuelto a la rutina y eso, en nuestro caso, es sinónimo de trabajo intenso. Aquí, en esta empresa, no hemos sufrido sobresaltos y no se vislumbra ninguna amenaza a corto plazo, pero el cielo aún no está despejado y no sabemos si la tormenta se está disolviendo o si se está preparando una nueva “ciclogénesis explosiva”.
 
Tras el paréntesis de las elecciones sindicales tendremos que fusionar dos convenios en uno solo, y ese trabajo, de precisión y detalle, va a necesitar también un gran esfuerzo y una gran generosidad.
Como decimos, hemos trabajado mucho y bien. El resto de los sindicatos merecen nuestro respeto. Algunas actitudes infantiles y oportunistas no las entendemos, y en estos tiempos raros y difíciles no se encuentran ganas de celebraciones ni autobombos. A nosotros y nosotras, los que dignificamos todos los días las siglas históricas de la UGT en la EMT, nos vas a seguir encontrando donde siempre y, sin duda alguna, nos vas a encontrar trabajando…