Tras
la perseverancia de la RLT por que se cumpliera el compromiso que adoptaba en
su día la dirección de la empresa Decathlon de constituir un órgano de
representación de los trabajadores a nivel intercentros, se constituía
finalmente, el pasado mes de abril, la Comisión Decathlon. Después de una
primera reunión, a principios de verano, en la que se dieron traslado a la
empresa dos de los temas más acuciantes, por el hecho del tiempo que llevan sin
resolverse, se nos emplazó a que, en el siguiente encuentro, planificado para
el mes de octubre, la dirección daría una respuesta de como intentar resolver
definitivamente esos problemas ya enquistados (irregularidades en el computo de
los exceso de jornada y la cantidad de solicitudes de excelencias voluntarias
cuya respuesta se demora excesivamente en el tiempo).
Y
el otoño llegó, y con él, la cruda realidad de que el compromiso adquirido
constituía un autentico canto de sirena. En la reunión que se celebraba esta
semana la dirección daba muestras del poco interés que tiene en resolver
situaciones que están vulnerando los derechos de sus trabajadores y
trabajadoras, limitándose a reconocer la existencia de esos problemas y
emplazando a su resolución en el nuevo convenio colectivo.
El
derecho a las excelencias voluntarias es algo que recoge el estatuto de los
trabajadores, por lo que no es susceptible de negociación, ya que pertenece al
bagaje de derechos ya conseguidos en su día por los trabajadores (como
vacaciones, salario, étc), y cumpliendo con los términos que dicho estatuto
establece, esas solicitudes no pueden ser denegadas. La empresa, sabiendo esto,
y para evitar su concesión, lo que hace es demorar en el tiempo la respuesta a
esas solicitudes para que, llegada la fecha en que tiene que hacerse efectiva,
el trabajador opte directamente por causar baja voluntaria en la empresa, así
eliminan la posibilidad de una solicitud de reingreso en el futuro.
Otro
punto al que debían contestar era las irregularidades detectadas en las reglas
que deben aplicarse para el cálculo de los excesos de jornada. La empresa
continua defendiendo que se ajustan a derecho, reconociendo que cuando alguien
solicita ese exceso proceden a compensarlo con aquellas licencias retribuidas
que el trabajador hubiera disfrutado, algo totalmente contrario al espíritu de
lo que es una licencia retribuida, porque de esta forma, se obliga a su
recuperación.
Desde
UGT
lamentamos profundamente el poco respeto que la dirección de la empresa muestra
con sus trabajadores, al constituir un órgano de representación como mero
trámite, vaciándole de contenido y, con la única finalidad de cumplir con el
expediente de cara a la galería. Nuestra defensa de la negociación colectiva, avalada por una
trayectoria histórica, que pone de manifiesto las bondades de la misma como vía
de resolución de conflictos, participación activa de los trabajadores en la
toma de decisiones de las empresas y establecimiento de unas relaciones
laborales buenas y productivas, harán que sigamos luchando por el
funcionamiento real de ese órgano de representación, aunque para la defensa de
los derechos de la plantilla de Decathlon, la empresa nos avoque continuamente
a la vía judicial.